2006-08-29

Curso de Ética profesional.


Bienvenidos a todos los estudiantes que están tomando el curso de Ética Profesional……..

A continuación aparece una compilación del concepto de ética profesional, espero que lo disfruten y escriban sus comentarios en la parte inferior de este artículo.
¿Por qué una ética profesional en nuestros tiempos?

Introducción

Algunos estudiosos de la conducta humana encuentran pequeñas diferencias en el uso de las palabras ética y moral. Esto se debe a que ambas prácticamente tienen el mismo significado y se relacionan entre sí. A saber, la palabra ética proviene del griego “ethos” (carácter, temperamento, hábito, modo de ser) y la palabra moral se deriva del latín “mos, moris” (costumbre, hábito). Ambas palabras (ethos y mos) se ubican en el terreno de la ética y hacen hincapié en un modo de conducta que es adquirido por medio del hábito y no por disposición natural. Por su definición etimológica, la ética es una teoría de hábitos y costumbres. Comprende, ante todo, “las disposiciones del hombre en la vida, su carácter, sus costumbres y, naturalmente también la moral.” (Aranguren).
El concepto ética en este escrito se analizará desde el punto de vista de Fagothey (1991) que establece que ésta “es el conocimiento de lo que está bien y de lo que está mal en la conducta humana” (2). A diario se enjuicia moralmente un acto y se afirma que es o no es ético, o sea bueno o malo, si este acto está a favor o en contra de la naturaleza y dignidad del ser humano.
Según Escobar (1992) “la ética nos ilustra acerca del porqué de la conducta moral y los problemas que estudia son aquellos que se suscitan todos los días en la vida cotidiana, en la labor escolar o en la actividad profesional” (1).

Necesidad de la Ética

Todo trabajador tiene o debe desarrollar una ética profesional que defina la lealtad que le debe a su trabajo, profesión, empresa y compañeros de labor. Villarini (1994) describe que “la ética de una profesión es un conjunto de normas, en términos de los cuales definimos como buenas o malas una práctica y relaciones profesionales. El bien se refiere aquí a que la profesión constituye una comunidad dirigida al logro de una cierta finalidad: la prestación de un servicio” (53). Señala, además, que hay tres tipos de condiciones o imperativos éticos profesionales: (1) competencia - exige que la persona tenga los conocimientos, destrezas y actitudes para prestar un servicio (2) servicio al cliente - la actividad profesional sólo es buena en el sentido moral si se pone al servicio del cliente (3) solidaridad - las relaciones de respeto y colaboración que se establecen entre sus miembros.
Para lograr en los empleados una conciencia ética profesional bien desarrollada es que se establecen los cánones o códigos de ética. En éstos se concentran los valores organizacionales, base en que todo trabajador deberá orientar su comportamiento, y se establecen normas o directrices para hacer cumplir los deberes de su profesión.
En virtud de la finalidad propia de su profesión, el trabajador debe cumplir con unos deberes, pero también es merecedor o acreedor de unos derechos. Es importante saber distinguir hasta dónde él debe cumplir con un deber y a la misma vez saber cuáles son sus derechos. En la medida que él cumpla con un deber, no debe preocuparse por los conflictos que pueda encarar al exigir sus derechos. Lo importante es ser modelo de lo que es ser profesional y moralmente ético. Por ejemplo, un deber del profesional es tener solidaridad o compañerismo en la ayuda mutua para lograr los objetivos propios de su empresa y, por consiguiente, tener el derecho de rehusar una tarea que sea de carácter inmoral, no ético, sin ser víctima de represalia, aun cuando esto también sea para lograr un objetivo de la empresa. Al actuar de esa manera demuestra su asertividad en la toma de decisiones éticas, mientras cumple con sus deberes y hace valer sus derechos. Además, demostrará su honestidad, que es el primer paso de toda conducta ética, ya que si no se es honesto, no se puede ser ético. Cuando se deja la honestidad fuera de la ética, se falta al código de ética, lo cual induce al profesional a exhibir conducta inmoral y antiética.

Hay tres factores generales que influyen en el individuo al tomar decisiones éticas o antiéticas (Ferrell, 87-96), los cuales son:

1. Valores individuales - La actitud, experiencias y conocimientos del individuo y de la cultura en que se encuentra le ayudará a determinar qué es lo correcto o incorrecto de una acción.
2. Comportamiento y valores de otros - Las influencias buenas o malas de personas importantes en la vida del individuo, tales como los padres, amigos, compañeros, maestros, supervisores, líderes políticos y religiosos le dirigirán su comportamiento al tomar una decisión.
3. Código oficial de ética - Este código dirige el comportamiento ético del empleado, mientras que sin él podría tomar decisiones antiéticas.
Un aumento en las regulaciones rígidas en el trabajo a través de los códigos de ética ayudará a disminuir los problemas éticos, pero de seguro no se podrá eliminarlos totalmente. Esto es así, debido a las características propias de la ética que establecen que ésta varía de persona a persona, lo que es bueno para uno puede ser malo para otro; está basada en nuestras ideas sociales de lo que es correcto o incorrecto; varía de cultura a cultura, lo cual no se puede evaluar un país con las normas de otro; y está determinada parcialmente por el individuo y por el contexto cultural en donde ocurre. No obstante, el profesional debe reconocer que necesita de la ética para ser sensible a los interrogantes morales, conocer cómo definir conflictos de valores, analizar disyuntivas y tomar decisiones en la solución de problemas

Problemas éticos:

En las relaciones cotidianas de unos individuos con otros surgen constantemente problemas cuya solución no sólo afecta a la persona que los crea, sino también a otra u otras personas que sufrirán las consecuencias. Da testimonio de esto Cartagena (1983) cuando señala que “las profesiones mismas están continuamente confrontando este asunto al constatarse los amargos hechos de médicos que explotan a sus pacientes, abogados que se dedican a actividades criminales, ingenieros y científicos que trabajan sin tomar en consideración la seguridad pública ni el ambiente y hasta negociantes que explotan al público indiscriminadamente. Si a esto añadimos la corrupción gubernamental, los robos, el vandalismo, los asesinatos y la violencia actual, entonces el tema ético toca el centro mismo de nuestra supervivencia como sociedad.” También Badillo (1990), sostiene que “el arquetipo del profesional, cuando se enmarca en la pura técnica, oculta, por principio, un ataque furtivo a la ética” (9). Esto crea situaciones que se complican en problemas que desmoralizan la imagen personal y profesional del individuo.
Algunos de estos problemas éticos son los siguientes:

Abuso de poder - utilizar el puesto para “pisotear” a unos o para favorecer a otros.

Conflicto de intereses - emitir normas en su ámbito de trabajo que redundarán en su propio beneficio, como lo es el participar en el proceso de reclutamiento cuando uno de los candidatos es miembro de su propia familia.

Nepotismo - reclutar muchos miembros de una misma familia en una institución.

Soborno - aceptar dádivas, obsequios o regalías a cambio de dar un trato especial o favor a alguien como retribución por actos inherentes a sus funciones.

Lealtad excesiva - mentir para encubrir la conducta impropia del supervisor o hacer todo lo que éste le diga, aun en contra de sus principios morales.

Falta de dedicación y compromiso - perder el tiempo, hacerse “de la vista larga” y no dar el máximo de su esfuerzo en el trabajo.

Abuso de confianza - tomar materiales de la institución para su uso personal o hacer uso indebido de los recursos disponibles en la misma.

Encubrimiento - callar para no denunciar a un traidor, movido por su amistad o por temor.

Egoísmo - buscar el bienestar propio en detrimento del beneficio de los demás.

Incompetencia - El conocido Principio de Peter (1977) estipula que en “toda jerarquía, todo empleado tiende a ascender hasta alcanzar su nivel de incompetencia.” Complementa, además, que “para todo puesto de trabajo que existe en el mundo, hay alguien, en algún lugar, que no puede desempeñarlo. Dado un período de tiempo suficiente y suficientes ascensos, llegará finalmente a ese puesto de trabajo y permanecerá en él, desempeñándolo chapuceramente, frustrando a sus compañeros y erosionando la eficiencia de la organización” (Peter, 28).

Problemas de esta magnitud requieren la acción enérgica y concertada del profesional para desarrollar una nueva ética. “Corresponde al momento actual compensar el poder del profesional moderno, en cuanto técnico, con una más fina percepción de sus regulaciones morales” (Badillo, 9). Como es sabido, en todas las profesiones surgen estos tipos de problemas. Es a través de cursos, cuya finalidad sea la formación ética profesional, que se logra desarrollar “en el futuro profesional el conocimiento, la habilidad, la sensibilidad y voluntad para que cuando actúe lo haga a nombre de los intereses de la comunidad profesional de la que es parte, de la comunidad que le une a sus clientes y del pueblo o humanidad de la que es miembro” (Villarini, 56).


Conclusiones

Para evitar en gran medida los problemas de índole ético-moral que surgen en el ejercicio de una profesión o de un oficio, se deben poner en práctica principios éticos que establezcan los parámetros y reglas que describan el comportamiento que una persona puede o no exhibir en determinado momento. No es difícil poner estos principios en práctica, pero el omitirlos redundará en perjuicio propio y en el de las personas con quienes se interviene o se interactúa. “Una decisión en la que está envuelto el comportamiento ético de una persona, siempre va a estar enmarcada en uno de los principios y valores aquí señalados” (Conética, 4 - adaptados).

Honestidad - Aprender a conocer sus debilidades y limitaciones y dedicarse a tratar de superarlas, solicitando el consejo de sus compañeros de mayor experiencia.

Integridad - Defender sus creencias y valores, rechazando la hipocresía y la inescrupulosidad y no adoptar ni defender la filosofía de que el fin justifica los medios, echando a un lado sus principios.

Compromiso - Mantener sus promesas y cumplir con sus obligaciones y no justificar un incumplimiento o rehuir una responsabilidad.

Lealtad - Actuar honesta y sinceramente al ofrecer su apoyo, especialmente en la adversidad y rechazar las influencias indebidas y conflictos de interés.

Ecuanimidad - Ser imparcial, justo y ofrecer trato igual a los demás. Mantener su mente abierta, aceptar cambios y admitir sus errores cuando entiende que se ha equivocado.

Dedicación - Estar dispuesto a entregarse sin condición al cumplimiento del deber para con los demás con atención, cortesía y servicio.

Respeto - Demostrar respeto a la dignidad humana, la intimidad y el derecho a la libre determinación.

Responsabilidad ciudadana - Respetar, obedecer las leyes y tener conciencia social.

Excelencia - Ser diligentes, emprendedores y estar bien preparado para ejercer su labor con responsabilidad y eficacia.

Ejemplo - Ser modelo de honestidad y moral ética al asumir responsabilidades y al defender la verdad ante todo.

Conducta intachable - La confianza de otros descansan en el ejemplo de conducta moral y ética irreprochable.

La ética debe convertirse en un proceso planificado, con plena conciencia de lo que se quiere lograr en la transformación de nuestras vidas. Debemos desarrollar al máximo el juicio práctico y profesional para activar el pensamiento ético, reconocer qué es lo correcto de lo incorrecto y contar con el compromiso personal para mantener el honor y el deber.
Hostos recomienda en su Tratado de Moral que “hay que poner de nuestra parte un continuo esfuerzo y una continua disposición de no salirnos del orden que contemplamos y acatamos. Ese esfuerzo y esa disposición, que es lo que constituye el deber, se derivan inmediatamente del hecho mismo de estar relacionado el hombre a sí mismo, a los otros y a la Naturaleza” (Pedreira, 184-185). Hostos, además, especifica que las relaciones particulares que ligan al individuo con la sociedad son las de necesidad, gratitud, utilidad, derecho y deber. De estas se derivan los deberes sociales de trabajo, obediencia, cooperación, unión, abnegación, conciliación y derecho. Expone que todos los deberes quedan sometidos a uno en general: “el deber de los deberes, que consiste en el exacto cumplimiento de todos los demás”, y cuando haya conflic-tos entre ellos, hay que “cumplir primero el más inmediato, el más extenso, el más concreto” (Pedreira, 188).
Al fin de cuentas, el ser humano es respon-sable de actuar inte-ligente y libremente y es el único que puede responder por la bondad o malicia de sus actos ante su propia conciencia, ante el prójimo y ante Dios, su Creador.

Elmy Rosario Galarce. La autora, puertorriqueña, es profesora del Departamento de Administración de Sistemas de Oficina de la Universidad de Puerto Rico del Recinto de Humacao

Bibliografía
Aranguren, José Luis. Ética. Madrid, Revista de Occidente. 1958.
Badillo, Pedro E. “Una visión humanística de la crisis en la educación”. Ábaco. Revista de Educación y Cultura. Santurce, P. R.: Promociones Plenamar. Núm. 2. 1990.
Cartagena, R. Puerto Rico Enfermo. Río Piedras, P. R.: Editorial
Cultural. 1983.
ELA de PR. Oficina de Etica Gubernamental. “Valores y Principios
Eticos de los Servidores Públicos”. Conética. Boletín Informativo. 1991.
Escobar, Gustavo. Etica. México: McGraw-Hill Co. 3ra ed. 1992.
Fagothey, Austin. Ética, Teoría y Aplicación. McGraw-Hill Co.
5ta. ed. 1991.
Ferrell, O.C. y Larry G. Gresham. “A Contingency Framework for Understanding Ethical Decision Making in Marketing”. Journal of Marketing, Summer 1985, 87-96.
Pedreira, Antonio S. Hostos, Ciudadano de América. Editorial Edil, Inc. 1976.
Peter, Laurence y Raymond Hull. El Principio de Peter. Plaza y
Janes. S. A., Editores. España. 1977, 28.

2006-08-04

El Portafolio


Si definimos claramente nuestras intenciones,
acciones, metas y propósitos en el Portafolio,
tendremos un horizonte de sentido
que nos va a permitir monitorear nuestro progreso
y ejercer correctivos en caso de desviaciones”

Humberto Gutiérrez



1. Concepto:


El Portafolio ha sido concebido como la colección sistemática y organizada del material que un estudiante produce durante la semana de acuerdo con las metas establecidas por él y las especificaciones propias del curso que esté realizando, con el propósito de monitorear su progreso en cuanto a conocimientos, habilidades cognitivas e interpersonales, actitudes y motivaciones; de poner en evidencia la calidad de los procesos, los aprendizajes y los productos realizados; y, de evaluar tanto los procesos, los aprendizajes y los productos llevados a cabo como los materiales producidos con el fin de identificar avances y necesidades, y proponer las acciones de seguimiento pertinentes.


En síntesis el Portafolio es una carpeta personal, dedicada al archivo de todas las evidencias de aprendizaje, referidas a las facilidades, dificultades o simplemente el registro de experiencias asociadas al acto de aprender (resúmenes, mapas conceptuales, cuadros, gráficas). Es una técnica que permite a la persona aprender a evaluar su desempeño en término de progresos o errores.

Los OBJETIVOS del Portafolio son: Facilitar el ejercicio de sistematización de experiencias. Aumentar la capacidad de reflexión sobre los textos leídos, así como un monitoreo de su trayectoria como estudioso(a). Desarrollar habilidades de escritura. Abrir un lugar para ejercitar su creatividad.

2. Atributos:

“Es un regulador de procesos de aprendizaje”.
“Contiene material básico para la Investigación Formativa”.
“Permite la autoevaluación como elemento fundamental en el proceso formativo del aprendizaje autónomo”.
“Es un dispositivo pedagógico de acompañamiento y regulación de disciplina”.
“Es una herramienta de reflexión sobre los logros y los aspectos a mejorar en un proceso de aprendizaje”.
“Evidencia el crecimiento personal e intelectual de su autor”.
“Permite precisar y jerarquizar el conocimiento”.
“Como dispositivo pedagógico facilita el proceso de metacognición y la construcción de conocimientos”.
“Es un espacio para la articulación de la teoría y la práctica”.
“Sirve como medio para realizar la evaluación del cambio cognitivo del estudiante”.
“Permite obtener conciencia del proceso metacognitivo realizado por el estudiante”.
“Es un elemento de consulta permanente que facilita la reflexión sobre los procesos de aprendizaje”.
“Es la evidencia de la investigación educativa centrada en la experimentación, evaluación y planes de acción como resultado de la práctica”.
“Permite establecer conductas de trabajo individual y cooperativo a partir de las actitudes individuales”
“Es facilitador del aprendizaje a través de procesos formativos que posibilitan construcciones propias del aprendizaje”.
“Es un medio integrador de la teoría y la práctica pedagógica en el escenario particular del aprendiente”

3. Organización del Portafolio:

La organización del portafolio comprende cuatro tareas, a saber:

La definición del propósito del mismo.
La selección del material de acuerdo con el propósito.
La reflexión de los resultados intrínsecos y extrínsecos del trabajo de la semana y
La proyección de metas futuras de aprendizaje.

La decisión sobre el material que se ha de coleccionar depende en gran medida de la claridad con que se defina su propósito.

4. Tipos de Portafolio
4.1. El Portafolio Individual

En esta carpeta se debe guardar la información respondiendo siempre a una tabla de contenido, que se convierta a la vez en un organizador cognitivo; esta es la recomendación:
Presentación del Portafolio (acorde al curso)
Objetivos (acorde al curso)
Lectura autorregulada (Podrá ser por capítulo o por unidad. Acordar con el tutor)
Idea fuerza, una al menos por capítulo
Pregunta contextualizada, una al menos por capítulo
Conceptos sobresalientes, los más importantes de cada capítulo Deben definirse
Mapa conceptual. Uno por unidad
Ensayo. Uno por unidad
Autoevaluación. Una por capítulo
Coevaluaciòn. Una por una unidad
Exámenes corregidos
Respuesta a ejercicios sugeridos en la guía
Otros materiales bibliográficos
Conclusiones

4.2. El Portafolio Grupal
En esta carpeta se debe guardar la información del Grupo colaborativo respondiendo siempre a una tabla de contenido, que se convierta a la vez en un organizador cognitivo; esta es la recomendación:

Presentación
Objetivos
Productos sugeridos por la guía
Productos sugeridos por el módulo
Actas de pequeño grupo colaborativo, al menos una cada quince días.
Actas de acompañamiento tutorial. Una cada quince días
Actas de gran curso. Una por encuentro
Exámenes corregidos
Otros materiales bibliográficos
Conclusiones



El Portafolio promueve un clima de reflexión. Surgirá el conflicto entre lo que ve y lo que realmente desearía que fuera. Piense, escoja y tome el riesgo de realizar preguntas sobre lo que ha causado una disonancia cognoscitiva. Realice preguntas que no haya podido resolver sobre el tema de la semana sobre sus procesos de aprendizaje o de todo lo que crea que permite una mayor comprensión de los procesos, someta todas estas inquietudes al trabajo en el pequeño grupo.

Es recomendable diligenciar un Portafolio por cada asignatura que se esté cursando, con el claro propósito de:

Compilar los materiales producidos individualmente o en forma colectiva.
Poner en evidencia el progreso en términos de calidad de los materiales producidos.
Demostrar el avance en su desarrollo personal e interpersonal.

En principio se seleccionarán y archivarán:
Los materiales que el autor del Portafolio produce semanalmente como requisito del curso o actividad académica en que se encuentre. Estos pueden ser manuscritos, pero claros.
Los materiales que resulten de la acción pedagógica del autor durante la aplicación y el ensayo del aprendizaje autónomo.
Los exámenes y otras pruebas.
Las instrucciones relacionadas con los trabajos especiales de la semana.

La esencia de un portafolio es la reflexión que hace su autor sobre cada elemento que lo constituye. “Una compilación de materiales sin reflexión es un archivo, más no un Portafolio”
[3]

La preparación de un Portafolio, tal como se acaba de describir, se convierte en una valiosa estrategia de desarrollo de la metacognición, por cuanto los participantes toman conciencia de sus propios procesos de pensamiento y aprendizaje y se convierten en gestores de su propio desarrollo personal y profesional.

Varios autores sugieren que la organización del Portafolio, refleja hasta cierto grado la personalidad y carácter de su autor. Una tabla de contenido, al comienzo de cada semana, le ayudará a poner las cosas en orden.

El éxito del Portafolio depende del cuidado con que se produzcan, organicen, consulten y comparen los materiales semana tras semana, a fin de descubrir patrones de desarrollo y de proyectar líneas de acción para aprendizajes futuros.

Cuando los procesos de aprendizaje, se acompañan de un dispositivo pedagógico ¾como el Portafolio¾ se permite el monitoreo del curso de acción del pensamiento y resultan mejores posibilidades para facilitar la reflexión y la autorregulación de la experiencia.

5. Valoración del Portafolio:

La evaluación y calificación del Portafolio es responsabilidad de su autor. Lo importante no es calificar la compilación, sino la dedicación y calidad con que se ha procedido en cada semana. En verdad, lo que el participante debe valorar en el Portafolio es la responsabilidad consigo mismo y el respeto por lo demás, antes que el número de páginas archivadas.

La calificación del Portafolio depende de tres criterios:

¿Está completo? Es decir, ¿contiene todos los materiales y artefactos que deben coleccionarse?
¿Está organizado? Es decir, ¿tiene una estructura y todos sus componentes están debidamente identificados, ordenados, categorizados y limpios, de suerte que un lector pueda recorrer fácilmente todas sus secciones y obtener la información que necesita?
Al observar los contenidos de la semana actual y compararlos con los de la semana anterior, ¿ayudó a medir su progreso y a producir materiales más imaginativos y más creativos? ¿Cuáles?
Cada estudiante es el veedor del Portafolio de un Compañero quien a su vez será el veedor del primero. Esta función es coevaluar el Portafolio de su compañero y corresponsabilizarse de la calificación que se asigne.


Ideas tomadas de la documentación orientadora para la Especialización en Pedagogía para el Desarrollo de Aprendizaje Autónomo y los aportes de los miembros del Grupo Medellín 2. (25-Jun-00)

DEFINICIÓN DE CONCEPTOS BÁSICOS PARA COMPRENDER LAS DIFERENTES ETAPAS Y MEDIACIONES DEL APRENDIZAJE EN LA METODOLOGÍA A DISTANCIA

Estudio independiente: Base del trabajo académico que realiza el estudiante en función de su formación.
Debe realizarse todos los días al menos tres horas. Es importante recordar que cada crédito académico tiene una duración de 48 horas, de las cuales el estudiante debe responder de manera independiente por el 50%.


El aprendizaje colaborativo: El aprendizaje colaborativo, está centrado básicamente en el diálogo, la negociación, en la palabra, en el aprender por explicación, y que el aprendizaje en red es constitutivamente un entorno “conversacional”. La teoría “conversacional” (Pask, 1975) sigue el punto de vista de (Vygotsky, 1979) sobre el hecho de que aprender es por naturaleza un fenómeno social; en el cual la adquisición del nuevo conocimiento es el resultado de la interacción de gente que participa en un diálogo. En efecto, aprender es un proceso dialéctico y dialógico en el que un individuo contrasta su punto de vista personal con el de otro hasta llegar a un acuerdo. Ese otro, también puede ser un “sí mismo”, de esta forma incluimos el dialogo íntimo y personal con uno mismo.


Encuentro en grupo colaborativo: Este es el espacio que se permiten los aprendientes, previa agenda, para socializar los trabajos que han realizado en estudio independiente. Siempre que se va allí se participa de una dinámica de juego de roles. Es fundamental que cada grupo tenga al menos un encuentro semanal.

Juego de Roles: Construirle una dinámica al conocimiento es una estrategia que permite aprender disfrutando y sobre todo construyendo un pensamiento crítico. Los siguientes son los roles básicos para esta actividad:


Moderador: Es quien prepara la agenda del día, quien concede la palabra, orienta la actividad y maneja el tiempo.

Expositor: Es quien presenta a sus compañeros de una manera creativa o didáctica el tema correspondiente
Opositor: Es quien prepara las preguntas que servirán para aclarar mejor el tema después de ser expuesto
Defensor: Es quien apoya al expositor o a la necesidad misma del tema
Relator: Es quien recoge las conclusiones más importantes sobre el tema en mención y las socializa
Observador: Es quien juzga de manera objetiva el cumplimiento de cada uno de los roles
Nota: El resultado de cada encuentro con su respectivo juego de roles debe ir al portafolio grupal.

Acompañamiento tutorial: Apoyo académico y pedagógico que el programa le brindan al estudiante para potenciar el aprendizaje autónomo y su formación en el marco de la educación a distancia. Puede ser sincrónico o asincrónico.
Debe ser cuando hay productos para socializar con el tutor o cuando existe una necesidad perentoria individual o colectiva de aclarar situaciones en las que el tutor es indispensable. Se estima que debe hacerse cada quince o veinte días.

Tutoría: apoyo u orientación que le brinda la Unad al estudiante y que hace énfasis en la apropiación del conocimiento disciplinar y las competencias profesionales.

Tutoría individual: es el acompañamiento que el tutor hace al estudiante con carácter de asesoría al aprendizaje de los contenidos temáticos, revisión de informes, evaluación de las actividades y seguimiento de su proceso formativo y de aprendizaje.

Aprendizaje cooperativo: situación de aprendizaje donde un pequeño grupo o equipo de estudio establece metas académicas y métodos de trabajo, que buscan maximizar la calidad de los productos de aprendizaje personales.

Crédito académico: Tiempo estimado de 48 horas que el estudiante dedica al trabajo académico en función de su formación, aprendizaje y dominio de competencias que espera desarrollar en el programa.

Curso académico: Parte esencial de la organización curricular y se constituye en la mediación pedagógica para el aprendizaje didáctico de saberes disciplinares o prácticas sociales específicas.

Mediación pedagógica: Tratamiento de los contenidos y de las formas de expresión de los diferentes temas con el fin de hacer posible el acto educativo, dentro del horizonte de una educación concebida como participación, creatividad, expresividad y relacionalidad. Parte de una concepción radicalmente opuesta a los sistemas instruccionales basados en la primacía de la enseñanza como mero traspaso de información.

Tutoría en grupo de curso: Es el acompañamiento que el tutor realiza al conjunto de los estudiantes a su cargo a través de procesos de socialización de las actividades desarrolladas en el trabajo personal y en los pequeños grupos colaborativos de aprendizaje, valoración de informes, intercambio de criterios en el aprendizaje y tratamiento de las temáticas. El encuentro en grupo de curso puede ser presencial, virtual o mixto, según las posibilidades tecnológicas incorporadas por la institución.
Debe darse al menos una vez por mes (Revisar calendario de actividades académicas).

Aprendizaje desde la conectividad: En la generalidad de los estados, las organizaciones están enfrentando retos desconocidos, derivados del acelerado desarrollo de la nuevas tecnologías de la información y de la comunicación que han obligado al cambio de paradigma. Lo anterior indica una seria crisis estructural agudizada, especialmente en Colombia, por incapacidad de las organizaciones para renovarse a sí mismas. Desde esta crisis y teniendo como contexto la sociedad de la información y la comunicación, ha surgido la educación virtual y dentro de ella muy especialmente la universidad caracterizada por la combinación e integración de cuatro elementos focales: el autoaprendizaje, el teleaprendizaje, el aprendizaje a distancia y el intercambio social.

En esta nueva estructura educacional, el espacio y el tiempo se han convertido en referentes de poco valor para la transmisión del saber, emergiendo así nuevas oportunidades para educación profesional y permanente y para la actualización del conocimiento requerido en los escenarios laborales.